cuento

Abrió la cremallera de su pantalón y mientras metía la mano bajo sus bragas ella le dijo:

 -tengo que decirte algo... pero no sé si decirte...

  (Silencio)

 - qué?

 - hoy no me depilé...

  (Risas)

 - y porqué no me querías decir...? 

- por que seguro vas a escribir eso en tu blog... 

- la verdad no hubiera resultado indiferente... pero tal vez escriba que no querías decirme que no te depilaste por que no querías que escriba eso en el blog. 

- mmm... que malo sos. 

- por qué? dijo mientras continuaba bajando la mano sobre su pubis no depilado. 

- por que sos malo. 

- y a que escuela entraste? le dijo mientras comenzaba a acariciar una vulva tibia y humeda. 

- el colegio que está a dos cuadras de acá. 

- siempre viviste acá. 

- un tiempo más cerca del centro, pero desde los 7 más o menos vivo por... (él le metió todo el dedo y ella se interrumpió un rato) por acá... vos fuiste a primer presidente...? 

- sí, contestó. Tenía una sonrisa indefinible. 

- y siempre viviste en el centro... 

- no, en barrio recoleta, me mudé acá a los 15. 

(Le metió otro dedo, ella está más agitada, se levanta y lo besa. lo aprieta contra la cama) 

- sos un hijo de puta, sabés? 

- ni tanto. 

- sí sos, y me voy a vengar. 

(Ella comienza a masturbarlo) 

- pensé que dejarme 40 minutos esperando en la callé a las 11 de la noche era parte de tu venganza. 

- no fue a propósito...! 

(Ella se levanta y busca algo en su cartera) 

- claro. 

(Ella vuelve con un preservativo, lo abre y lo desenrolla sobre el pene erecto que tiene enfrente) 

- vos creés que lo hice a apropósito? 

- no sé... sé que me quedé rodeado de gente extraña más tiempo del que hubiera deseado... 

- y estás enojado?  

(Ella sube sobre él y se deja penetrar) 

- puede ser... voy a decidirlo más tarde. 

- cuando? 

- cuando termine de follarte, contestó y la volteó. 

(Gemidos, jadeos,  gritos, etcetera, etcetera, etcetera...) 

Tres horas más tarde él se levanta. Enciende la computadora y entra a su blog. Piensa. Voltea y mira ese cuerpo desnudo, aún lleno de sudor que se extiende a lo largo de la cama. Se levanta, enciende el ventilador. Vuelve a la computadora. Siente como la piel desnuda de su culo se pega a la silla de plástico. Escribe: 

Abrió la cremallera de su pantalón y mientras metía la mano bajo sus bragas ella le dijo: 

-tengo que decirte algo... pero no sé si decirte... 

   (Silencio)